Las tarjetas eSIM poco a poco van reemplazando a las tarjetas SIM tradicionales. Hablamos de tarjetas virtuales que pueden instalarse a través de un código QR proporcionado por el operador o desde la aplicación, que facilitan tareas como portabilidades o el reemplazo en caso de pérdida o robo, entre otras ventajas.
Sin embargo, probablemente lo que más esté fallando en España sea la integración de este nuevo sistema. Operadores como Movistar solicitaban a sus clientes acudir a una tienda física y pagar el precio de un duplicado (14,50 euros) para conseguir un código QR de un solo uso que permitía el cambio de SIM tradicional a eSIM, siendo un proceso algo engorroso y lento. Por su parte, O2 permitía elegir el formato de la tarjeta en el alta, si bien para hacer cambios posteriores requería ponerse en contacto con ellos.
No obstante, parece que todo va a mejor: las dos compañías pertenecientes a Telefónica ahora son compatibles con el servicio eSIM Quick Transfer de Apple, que a grandes rasgos permite reemplazar una tarjeta SIM física por una eSIM de forma automática a través de Internet, sin necesidad de acudir a ningún punto de venta.
Para usar este servicio, necesitarás tener un iPhone compatible con la versión del sistema operativo iOS 17.2 o superior. Si tienes una tarjeta SIM física de O2 o Movistar introducida, y accedes a la sección Datos Móviles dentro de los Ajustes, encontrarás una nueva opción para realizar el cambio a eSIM manteniendo la numeración. Necesitarás una conexión a Internet Wi-Fi y, una vez finalizado, podrás retirar la tarjeta SIM.
Este proceso no tiene ningún tipo de coste para los clientes de O2 o Movistar, si bien debe entenderse que una vez procesado el cambio a eSIM no será posible hacer uso de la tarjeta SIM anterior. En caso de necesitar volver a la SIM física, el cambio es gratuito para los clientes de O2 pero tiene un coste de 14,50 euros para los de Movistar.